Un hombre negro va a la casa de su vecina, una viejita, para echarle una mano. Tiene las rodillas que se le doblan de la emoción cuando insiste en dejar que la vieja le acaricie el pene en el baño. Con un oral bien hecho, mete su semen en la mano de la vieja. Cuando ve que su amiga se pone los pantalones, la anciana que había salido antes que él se acerca a él. Aprovechando que ahora las mujeres mayores están de moda, el negro se dirige al dormitorio cuando esta anciana también quiere hacer el amor. Cuando la vieja le pide que se la meta por el culo para dar celos a su amiga, él, sin pensárselo dos veces, se la mete sin piedad por detrás.Un repartidor negro toca el timbre para entregar un producto a un cliente. La mujer rubia con minifaldera abre la puerta y le dice que espere un momentito para comprobarlo. El hombre negro, que está ahí esperando a que le manden el producto equivocado, se pone rojo de la vergüenza cuando ve el juguete sexual fuera de la caja en el dormitorio. Pero la chica sexy pone el vibrador en el regazo del chico y le dice que es más pequeño que su polla. Así, el pene del mensajero, que resulta más pequeño, le parece más atractivo y prefiere tener sexo con él.